miércoles, 6 de enero de 2016

Si es así atrévete a decir que no es amor

Hay caricias que llenan el alma de calor, hay miradas que alumbran corazones, hay abrazos que recomponen cuerpos.El ser humano fue hecho por otro ser humano y es aquel quien posee el poder de matarlo. No hablo de forma física, que también, sino espiritual.
Hay almas que mueren al perder el tacto de su amado. Como si se tratase de una rosa que va perdiendo sus pétalos hasta dejarlo inservible, inerte. Su cuerpo esta ahí deambulando pero su esencia ha desaparecido. 
Hay gente que da abrazos con guantes, con cuidado de no congeniar demasiado. Siendo cercano pero guardando la distancia. Se llaman ladrones del corazón porque cualquier día se irán y se llevaran ese abrazo y junto a él parte de ti. Te descompondrán por completo y te harán dudar de tu existencia. No porque ellos se hayan ido sino porque no recuerdas como eras antes de ese abrazo.
Lo mismo pasa con los que te dicen te quiero muy bajito. Lo susurran para que solo tu lo sepas haciéndote creer que nadie más debería saberlo. Que vuestro amor es solo vuestro. Es un sonido tan bajo como efímero. Lo recordarás como si hubiera sido el momento más feliz de tu vida sin darte cuenta de que ese "te quiero" al momento de decirlo se esfumó. No es tuyo ese te quiero, no es de nadie. Los te quiero que se esconden, los taciturnos, los que se dicen y no se escriben son los que más duelen. Aquellos que solo podrás revivir en recuerdos. Aquellos que no sabrás si era un sueño, una pesadilla o la vida misma.  
También los hay que solo te ceden la mirada. Esos son los peores. Ellos verán como eres pero no quien eres. No se molestaran en saber que hay detrás de esa sonrisa forzada. No querrán despellejar hasta encontrar el ultimo rincón de tu alma. Solo querrán la carcasa, aquello que desvanece con el paso del tiempo. Y es que ellos no tienen planes de quedarse más. Querrán exprimir cada una de tus sonrisas hasta que el contador llegue a cero y decidan que el producto ha caducado. No serás más que una imagen para ellos y como tal solo verán el reflejo de lo que eres. 
Los habrá que creen que te están dando los mejores años de su vida cuando en verdad lo que están haciendo es quitarte los mejores tuyos. Que se crean fuego cuando solo son escarcha. Intentarán hacerte creer que si las cosas van mal es por tu culpa. Estos creen que cuando dan un paso al lado tuyo debes darles las gracias. Querrán que escales el mundo por ellos, que cojas la luna, se la regales y vuelvas a escalar el mundo. Te harán creer que lo que haces no es suficiente, que debes luchar más por ganarte un hueco mayor en su corazón. No te darán oportunidad de rechistar porque al fin y al cabo todo fue idea tuya. El nunca te dijo que subieras y fueras a por nada, no al menos literalmente. El problema de este amor es que algún día te tropezaras en la escalera y él no estará para recogerte. Te darás cuenta de que estabas tu sola, que no había nadie más en su propia escalera buscando nada por ti y finalmente acabaran volviéndote escarcha a ti. Dicen que esos amores son los que dejan huella porque una vez eres escarcha cuesta mucho derretirte.  
Pero no esta todo perdido, o al menos eso pienso yo. Aún queda un ultimo tipo, aquel del que vale la pena hablar. Ese amor, es aquel que te mereces. Ese que es como el aire. Aquel que llega a todas partes, que te deja los pelos de punta. Ese que va a estar en privado y en publico. Sin elecciones, porque es así, porque debe ser así. Aquel que no notes solo tu, sino todo el mundo a tu alrededor. Aquel que sea el aliento que te da calor sin tu pedirlo. Aquel que sea un hecho, no una opinión. Aquel que no se vea pero se sienta. Que no entienda de distancias porque aun a mil kilómetros este al lado tuya. Ese aquel es el adecuado, y si no es así, atrévete a decirme que no es amor.

El arte de la vida

No creo en las medias naranjas. Digamos que John Lennon me convenció por completo cuando dijo eso de que nacemos enteros. Yo, de hecho, me considero una persona muy completa. Soy igual con o sin pareja. Tengo las mismas ilusiones, los mismos retos y los mismos miedos. No creo que nadie deba cubrir mis defectos ni me dejo llevar por el significado de que encontrar a otra persona me dará plenitud. Yo de por si soy un pleno. Un 10. Pensar que soy solo la mitad de algo esta muy por debajo de mi ego.
Pero tampoco creo en el amor como complemento. El amor no es un bolso, no debe combinar contigo. Tiene que ser algo más. Porque si fuera algo de lo que puedes prescindir entonces no tendría sentido quererlo amarrar para toda la vida. Ni siquiera querrías a tus zapatos favoritos si te dijeran que a partir de ahora no puedes ponerte otro, entonces, ¿qué pasa con nosotros? 
 En los "eres mio" o "soy tuya" tampoco creo. Por suerte me educaron para saber que gozo de muchos derechos y libertades. Entre ellos la libertad de ser la persona que quiero ser. Y quiero ese derecho. Quiero ser hoy una princesa, mañana una guerrera y pasado lo que me de la gana. Si soy tuya debo pedirte permiso, dependo de ti y eso jamás podría permitírmelo. Me enseñaron a ser independiente, a elegir a alguien con quien vivir pero sabiendo siempre que en el momento en el que no se pudiera más podría marcharme y no pasaría nada. Porque si, porque eso de que las parejas antes luchaban más que ahora es muy bonito pero hay que saber cerrar los libros. Hay que saber cuando algo no da más a basto. Entonces, ¿Qué eres? 
 Puedo recurrir a Forrest y decir que eres un poco de destino y un poco de persona flotando casualmente al lado mía. Puedo creer que eres una ilusión hecha realidad. Lo cierto es que no encuentro una explicación y esto es lo que me llevo a pensar que igual ese es el significado del amor. A lo mejor todo esto se trata simplemente de estar con la persona con la que estas a gusto mientras pasa la vida. A lo mejor la mejor respuesta siga siendo hacerse una pregunta. 
Igual esas parejas que llevan 50 años aun no tienen la solución. Igual esa es la solución. Igual nos toca hablar con palabras mayores y darnos cuenta de que el verdadero rompecabezas de esta vida no era el por qué o el como si no el con quien. Y una vez tengas a ese quien dejar de rayarse. Lo has encontrado, disfruta, que uno a veces se pasa la vida esperando cosas sin darse cuenta de que inevitablemente lo único que pasa es eso, la vida.